El Rincón de los Niños Perdidos

"No hay ensayo general, cada día es debut y despedida"

viernes, octubre 19, 2007

Todas las Mañanas Del Mundo


No hace mucho tiempo que buscando entre carpetas olvidadas de mi años de estudiante – aunque uno nunca termina de aprender a lo largo de su vida-, encontré un recorte de la película Todas las mañanas del mundo, y la frase que coronaba uno de los clasificadores de la susodicha carpeta Todas las mañanas del mundo son caminos sin retorno. Casi la tenía olvidada, agazapada entre los recuerdos pero resurgió. Fue hace muchos años cuando la vi, pero esta anécdota me sirvió para rescatarla y decirme a mi misma que tenía que volver a verla.

Y esta semana navegando por la red descubro esta noticia. Una casualidad, o un acierto del destino quién sabe. Pero toda una oportunidad para disfrutar de esta bella película en todo su esplendor.

Todas las mañanas del mundo nos sitúa en la Francia del siglo XVII, Sainte- Colombe es el gran maestro del arte de la viola de gamba, a pesar de su virtuosismo y aclamación por la corte prefiere vivir retirado en su casa alejado del boato y el festín. Marin Marais, un joven al que han expulsado del coro, quiere conseguir por todos los medios que el gran maestro Sainte-Colombe sea su profesor de viola de gamba. Al fin este hecho se produce. A lo largo de lo años que dura la relación de ambos, maestro y alumno, se pondrán de manifiesto los diferentes caracteres de ambos.

La cinta está dirigida por Alain Corneau, músico de formación, aunque poco puedo decir de él ya que no he tenido la suerte de ver ninguna película más dirigida por él.

Lo que si puedo destacar es el reparto de la misma, encabezada por Jean-Pierre Marielle, prolífico actor francés al que hemos podido ver más recientemente en la taquillera El código Da Vinci dando vida a Jaques Sauniere con quien empieza toda la trama de la misma. En la cinta que nos ocupa interpreta al maestro Monsieur Sainte-Colombe.

A su aventajado alumno le da vida Guillaume Depardieu en su etapa de juventud y, muy apropiadamente, Gérard Depardieu en su época adulta.

Fue en esta película dónde descubrí al fenómeno que Gérard tiene por hijo, y al que después en pocos títulos he podido disfrutar salvando la española Amor, curiosidad, prozak y dudas. Aunque en Todas las mañanas su aparición no es que sea muy larga, su interpretación es correcta y a mi juicio le imprime el carácter que requiere el personaje.

En cuanto a su progenitor, Gérard Depardieu, considero que ésta junto con su papel en Germinal (la recomiendo a todos aquellos que aún no la hayan visto), son dos de sus más destacadas actuaciones. La carrera del actor francés no para y está visto que tiene en cartera un buen número de proyectos, tampoco es que haya parado en algún momento pues tiene un buen puñado de películas a sus espaldas. Si bien ambos, padre e hijo, han coincido en más de un título, aunque en su mayoría han sido miniseries para la televisión como El Conde de Montecristo.

El resto del reparto son actores franceses con unas carreras cinematográficas centradas en la producción francesa, aunque el nombre de Anne Brochet le puede sonar a más de uno por haber sido quien encarnara a Roxane en la versión del año 1990 de Cyrano de Bergerac, también junto a Depardieu.

A parte de destacar las interpretaciones, un detalle que no puede escapar en esta película es la banda sonora, interpretada por el violagambista Jordi Savall apoyándose en las partituras de Sainte-Colombe y Marais. No soy ninguna experta en música clásica o antigua, pero lo que si sé es reconocer una pieza que me guste, y en este caso así es. La música que podemos escuchar es el complemento perfecto para la historia que nos muestra la película.

La historia, aunque ficticia en la forma, si parte de un hecho real, el maestro Sainte-Colombe si dio clases a Marin Marais aunque no por mucho tiempo, ya que Sainte-Colombe sabía que no podía enseñarle más de lo que ya había hecho y superaría con creces a su maestro.

En cuanto a palmarés que la avale, en la edición de 1992 de los premios César se alzó con siete premios, entre los que se encuentran el de mejor película, director y música.

En general es una muy buena película, aunque a veces pueda resultar un poco lenta. Pero a mi juicio recomendable.

Mi puntuación: 7,5/10
Lo mejor
: la interpretación unida a la banda sonora
Lo peor: resulta lenta en alguna parte de la historia
La escena: Marin Marais tocando la viola al pie de la cama de la hija de su maestro
La frase: Todas las mañanas del mundo son caminos sin retorno

Contenido: Drama:3; Romance:2

2 chismorreos:

Recuerdo haber visto este film siempre en la batea de mi videoclub. Saludos!
 
Y nunca lo has alquilado? animate un día y ya me contarás, merece la pena.
Un saludo